La emocionante procesión del Encuentro, con sus dos cortejos marchando para situar frente a frente las tallas del Resucitado y la Virgen, brindó este domingo la última gran imagen de estos días en los que se revivió el paso de la Pasión por las calles del centro urbano
El Ayuntamiento agradece el duro trabajo de los costaleros y anderos, los esfuerzos de la Hermandad de la Esclavitud del Santísimo Sacramento por cuidar al máximo cada detalle y la colaboración de Policía Local y Protección Civil, destacando de modo especial “la importancia de recuperar los desfiles procesionales para felizmente volver a vivir una estampa muy esperada por todos”
Poco antes del mediodía del domingo arrancaba la última de las procesiones que han vuelto a recorrer el centro urbano de Valdemorillo en su Semana Santa más esperada, la que ha devuelto la estampa de tradición llevando pareja la devoción y expresión popular que entrañan estas fechas. La villa ha revivido al fin las estampas de tradición de las que se vio privada desde inicio de la pandemia, “resucitando” la presencia de pendientes, el esfuerzo de costaleros y anderos, los sones de la banda, con sus redobles de tambor y sus toques de trompeta y, en suma, los cortejos que, al fin, han vuelto a ser la imagen propia de estos días. Así, desde el pasado Jueves Santo, cuando arrancaron los principales actos de esta Semana Santa 2022 con la misa vespertina de la Cena del Señor que dio paso a toda una noche de turnos de vela en el monumento instalado en la iglesia que mantuvo así sus puertas abiertas, hasta este festivo 17 de abril, la población ha recuperado la normalidad en la celebración de sus tradiciones.
Fue el Viernes Santo cuando los costaleros locales volvieron a cargar sobre sus hombros los cerca de 800 kilos del paso de Jesús Nazareno, mostrando la entrega y devoción que alienta esta primera procesión, que ya dejó patente también el esmero con el que los miembros de la Hermandad de la Esclavitud del Santísimo Sacramento cuidan al máximo de cada detalle. Autoridades y vecinos sumaron igualmente su participación en el recorrido marcado por las catorce estaciones del Vía Crucis que hizo revivir recuerdos y sensaciones. Tomando ya el testigo, justo a día siguiente, Sábado de Gloria, le llegó el turno de procesionar a la bella talla de la Virgen de la Soledad y Dolores de María, para marchar igualmente por el corazón urbano de Valdemorillo, despertando la profunda emoción que envuelve siempre este desfile.
Y como el mejor broche para hacer brillar la despedida de esta Semana Santa tan especial, el Domingo de Resurrección fueron dos los cortejos, el de los hombres acompañando al Resucitado y el de las mujeres a la Virgen, que, siguiendo vías distintas, se encontraron para, una vez situadas ambas tallas una frente a otra, ofrecer la última gran imagen de estos días en los que finalmente se acabaron las esperas resucitando el paso de la pasión a pie de calle. Además, tampoco faltó la novedad, ya que esta vez se estrenó itinerario de vuelta tras el Encuentro, portándose ambos pasos por delante del Consistorio para seguir por el eje que forman sendos tramos de las calles La Fuente y Ramón Gamonal hasta tomar Balconcillos para hacer su reentrada en el templo parroquial.
Dada la brillantez con la que se desarrollaron cada una de las procesiones y demás actos, el Ayuntamiento quiere hacer público su agradecimiento, “especialmente a nuestros costaleros y anderos por el duro trabajo realizado, así como la gran implicación mostrada en todo momento por la Hermandad de la Esclavitud del Santísimo Sacramento y la colaboración de los efectivos de Policía Local y los voluntarios de Protección Civil”.