Las emblemáticas chimeneas acogen la exposición que descubre en detalle la historia de la antigua fábrica

Las emblemáticas chimeneas acogen la exposición que descubre en detalle la historia de la antigua fábrica

La concejal de Educación y Cultura, con competencias también en turismo, destaca la singularidad de esta iniciativa, “ya que estamos desentrañando toda la labor industrial que se realizó en el mismo espacio donde desde 1999 se alza nuestra Casa de Cultura, por lo que la historia que ahora hacemos visible realmente forma parte de la vida de muchas generaciones de valdemorillenses y de nuestra propia identidad como pueblo”  

  • Fotografías, piezas y documentos dan a conocer la importancia que llegó a cobrar la fábrica de loza, porcelana y vidrio en sus dos etapas, primero con Falcó y compañía (1845 / 1914), y su posterior desarrollo en la época de Giralt Laporta, desde 1917 a 1937, cuando fue destruida durante la guerra civil, quedando en pie algunos muros y los tres hornos, Vulcano, Moisés y Progreso, ahora en activo para “fabricar cultura”
  • La muestra puede visitarse hasta el 22 de octubre, contando con recorridos guiados y talleres previa cita. Más información en valdemorilloescultura.com
  • Actividad enmarcada en el Año Internacional del Vidrio 

Valdemorillo encuentra en la historia de la antigua fábrica de loza, porcelana y vidrio un capítulo muy importante de su propia historia, porque desde que iniciara su actividad a mediados del siglo XIX, hasta su desaparición en la primera mitad del XX, en ella se forjó, durante casi 100 años, una producción que dio empleo a generaciones de valdemorillenses y fama a la localidad en el plano industrial. Ubicada en los terrenos donde se alza desde hace más de dos décadas la Casa de Cultura que lleva precisamente el nombre del último de sus gestores, la recordada fábrica va indisolublemente unida a las señas de identidad de esta villa. Y si de allí antes salieron infinidad de piezas, entre vajillas, artículos de farmacia, material para instalaciones eléctricas y tantos otros productos, ahora en los tres hornos aún en pie, sigue en marcha la fabricación “ininterrumpida” de una labor cultural que hace también de esta localidad un referente.

Todo esto se hace visible para acercar la imagen, el dato, la fecha, dando a conocer la evolución, a lo largo de sus dos etapas, de la fábrica que inició andadura en 1845 con Juan Falcó, que ese año formaría sociedad con Felipe del Callejo, incorporándose al siguiente Vicente González y Pedro María Rubio, pasando a denominarse Sociedad del Aulencia o de Falcó y Cía. Una primera fase durante la que el proceso de fabricación fue avanzando, llegando ya en 1900 a tener capacidad para producir 1.115.000 piezas con 134 trabajadores. Premio de Mérito en la Exposición de Industrias Madrileñas de 1907, esta primera época echó el cierre en 1914. Tomando el testigo, tres años más tarde José María Giralt adquirió las antiguas instalaciones, construyendo al poco dos hornos más siguiendo el modelo del levantado en la etapa anterior e introduciendo la fabricación de vidrio soplado y resistente al fuego bajo la marca VALMA. Estas y muchas otras curiosidades y anécdotas se recogen en la detallada cronología que acompaña la muestra.

Fotografías, piezas y documentos asoman así en las vitrinas y paneles donde hasta el 22 de octubre el público puede descubrir todo lo relacionado con la antigua fábrica, desaparecida en los bombardeos de la batalla Brunete, de los que sólo se salvaron de quedar en pie unos muros y las chimeneas convertidas en auténtico emblema de esta población. “Esta es una exposición muy singular, porque se muestra la propia historia local, la forma de vida y trabajo de generaciones de valdemorillenses, y por eso seguro que va a despertar un interés especial entre nuestros vecinos”. Así lo apunta Eva Ruiz, quien como concejal responsable del área promotora de la iniciativa señala la posibilidad de apuntarse a los recorridos guiados y talleres que se han organizado como complemento a la exposición y en los que para participar hay que solicitar cita previamente. En cuanto al horario de visitas, la sala Vulcano permanece abierta de lunes a viernes, de 10,00 a 14,00 y de 17,00 a 20,00 h, y los sábados también se puede acudir entre las 11,00 y las 13,00 horas.